Día del Árbol en Bolivia (Cecilia Requena en X Twitter 1.9.10)

Día del árbol en Bolivia

#DíaDelÁrbol Este año hemos perdido ya cerca de 400 millones de árboles por la quema de #bosques en pie (V. Vos). Los árboles son indispensables para la trama de la vida: generan el oxígeno q respiramos, regulan el clima, previenen la erosión y son el hogar de incontables seres.

Senadora Cecilia Requena

La provocación del discurso de Milei en la ONU (Gisela Derpic, Brújula Digital, 30.9.24)

La puntualización del mandatario argentino sobre el ingreso de las dictaduras de Cuba y Venezuela al Consejo de Derechos Humanos, cuando existen múltiples y contundentes evidencias de las atroces vulneraciones de estos derechos por tales oprobiosos regímenes, es digna de especial mención y apoyo. Se trata de uno de los fallos más profundos de la ONU que le quita autoridad moral. Que funda una crítica airada exigiendo un viraje drástico al respecto.

https://www.brujuladigital.net/opinion/la-provocacion-del-discurso-de-milei-en-la-onu

Un balance de la marcha o el fin de los saqueadores (Diego Ayo, Brújula Digital 24.9.24)

Los esforzados marchistas son la perfecta radiografía del modelo económico imperante en Bolivia y su inminente decadencia. Vivimos el auge del gas hasta 2014 y, aunque éste ya no existe, arroja esta marcha de masistas contra masistas. Sostengo que esta marcha deja ver un fenómeno fantástico: la decadencia de los rentistas. ¿Qué es eso? Y, sobre todo, ¿cómo se relaciona con el modelo económico vigente desde enero de 2006? Veamos.

Uno, el modelo jamás premió el mérito. No hay boliviano que pelee mostrando su título universitario. El modelo no premió a los generadores de riqueza. A los auténticos promotores de empresas novedosas. No, el Estado sólo atendió a aquellos que se dedicaron a “arrancar” rentas del Estado, es decir, no a los que crearon nuevos ingresos sino a los pelearon por distribuir los que ya existían gracias a la economía del gas. Esas son las rentas y ese es el saldo final: luchamos por inflarnos de rentas, jamás luchamos por producir riqueza. No fue esfuerzo propio el que empujó a ese desenlace, fue conexión política: “somos del MAS, recibimos”. Ergo, primaron los incentivos no-meritocráticos y no una sana lógica de trabajo-inventiva-salario.

https://brujuladigital.net/opinion/un-balance-de-la-marcha-o-el-fin-de-los-saqueadores

El analista Diego Ayo no es miembro de Una Nueva Oportunidad. UNO alienta el debate de ideas pero no se adscribe necesariamente a los contenidos de este artículo.

Gentileza de ABECOR / Visión 360

Hablemos de marchas (Carlos Derpic, Brújula Digital, 25.9.24)

[... en la "Marcha por la Vida" (1986)] Ninguno de los marchistas recibió pago alguno por participar. Durante la marcha  se fueron plegando maestros, ferroviarios, fabriles, universitarios, amas de casa, campesinos e indígenas. En varias comunidades ubicadas en el camino de Oruro a La Paz, los marchistas eran recibidos por los comunarios con comida. La Iglesia católica, encabezada por ese gran arzobispo que fue Jorge Manrique, estuvo presente auxiliando a los marchistas con medicinas, alimentos y vituallas. Los dirigentes que encabezaban la marcha iban junto a las bases caminando, no en vehículos lujosos, y soportaban, como todos, las inclemencias del tiempo; dormían en el camino. Lo mismo sucedió con dirigentes políticos que se sumaron a la cruzada. Marchaba de Oruro a La Paz el Bloque Social Revolucionario del que habló el MIR de los años 70.

Cuánta diferencia con el remedo de marcha que hemos vivido estos días a cargo de una facción del MAS, organizado por un enfermo de poder y sus adláteres, que no marchó, sino que acompañó el desplazamiento desde una lujosa vagoneta, en la que se resguardaba de la lluvia, mientras la bases tenían que soportarla.

https://brujuladigital.net/opinion/hablemos-de-marchas

Marcha por la Vida (1986)

¡Es el poder, estúpido! (Hernando Calla, Correo del Sur, 24.9.24)

Hoy la devaluación de facto, la caída de la actividad económica y la disparada de precios ya están más que vaciando los bolsillos de la gente; en consecuencia, la legitimidad y credibilidad del gobierno de Arce Catacora se está yendo a pique por estas razones económicas, lo que ameritaría quizás escribir otra nota sobre las variables macroeconómicas en términos del slogan gringo ¡es la economía, estúpido!

Pero en esta ocasión, la división del MAS entre evistas y arcistas nos da la oportunidad de dilucidar la distinción conceptual entre el poder y la fuerza, es decir, entre el poder político de los unos y la fuerza gubernamental de los otros. En efecto, la prolongada pulseta entre Evo y Arce está adquiriendo ribetes de una clásica confrontación entre poder y gobierno, esto es, entre el poder político corporativo que aún tiene Morales entre sus bases cocaleras del Chapare y otras organizaciones campesinas de tierras altas (Cochabamba, Potosí) y la fuerza gubernamental que controla Arce como titular del poder estatal, incluidos funcionarios gubernamentales obligados a conformar ¡grupos de choque parapoliciales! (como se ha podido constatar una vez más en la “marcha para salvar Bolivia” del evismo hacia la sede de gobierno).

https://correodelsur.com/opinion/20240923/es-el-poder-estupido.html